En su 51a edición, el Premio Tanizaki ha sido para Ekuni Kaori por su novela Yamori, kaeru, shijimichō (Lagartijas, ranas, mariposas, Asahi shinbun shuppan, 2014).
En esta novela, la prolífica autora combina dos de sus temas favoritos: el mundo de los niños y las relaciones de pareja disfuncionales. Su protagonista es un niño pequeño que tiene la habilidad de comunicarse con los animales. A través de sus experiencias y relación con la naturaleza, la obra retrata el entorno social del pequeño y la precaria relación de sus padres.