Hoy se cumplen 75 años de la muerte del escritor Takami Jun (1907-1940).
Takami nació Takama Yoshio en Mikuni (Fukui), como hijo ilegítimo de Sakamoto Sannosuke (1857-1936), gobernador de la prefectura, y Takama Koyo. Nunca conoció a su padre, que lo envió a Tokyo nada más nacer junto a su madre, a quien pagaba una exigua pensión.
Takami siguió el camino de la élite intelectual de preguerra y estudió en el Primer Instituto de Educación Secundaria (Ichi-kō) y la Universidad Imperial de Tokyo, donde trabó contacto con grupos de arte vanguardistas y de izquierdas. Después de graduarse entró a trabajar en la discográfica Nippon Columbia, al tiempo que publicaba relatos en revistas de literatura proletaria, pero la represión política de los años treinta le llevó a pasar tiempo en la cárcel y le forzó a dejar de lado los temas políticos.
Su primer éxito como novelista fue Ika naru hoshi no shita ni (Bajo cualquier estrella, Bungei, 1939-1940), que describe el amor de un escritor por una bailarina de Asakusa. Después de la guerra volvería a temas más comprometidos como la violencia política en el Japón de preguerra, como en Iya na kanji (Una sensación desagradable, Bungakukai, 1961-1963), protagonizada por un joven anarquista.
Ganó el premio Noma por su colección de poemas Shi no fuchi yori (Desde el abismo de la muerte, Gunzō, 1964).